Prohibidos los durianes en el MRT |
El durián con su aspecto intimidante - es como un "coco puyúo" salido de un juego de Super Mario Brothers - con un aroma inconfundible y -para muchos- francamente repulsivo. A mi me gusta el helado de durián, y hasta Carla, con dos años de edad, puede saborear un helado de durián sin problemas.
Por otro lado, el mangosteen es una pequeña fruta del tamaño de un durazno, pero con una gruesa cáscara de color morado. Hay que abrir el mangosteen para poder llegar hasta los jugosos gajos blancos, con un sabor muy delicado, parecido al lichee.
Mangosteens en el mercado |
Según la leyenda, comer durián y tomar alcohol al mismo tiempo es muy dañino para la salud.
Con ambas frutas se preparan multitud de postres típicos en los mercados populares, y es muy común pedir "helado de durián" en los carritos de helado que se encuentran por todo Singapur.