30 septiembre 2014

El kinder en Singapur

En esta ciudad todo el mundo tiene que hacer algo - la competitividad patológica de los Singapureanos y el miedo a "quedarse afuera" empieza desde la mas tierna infancia.

Hasta los nenes en edad pre-escolar son arrastrados a "clases de superación", "cursos de Mandarín para bebés" o "matemáticas infantiles" por los padres que buscan criar a pequeños genios de las finanzas o a pequeñas directoras del Marketing.

Hay diversas opciones para que los nenes comiencen los estudios en Singapur : desde los centros de enseñanza especializados, pre-escolares (privados), guarderías y jardines de infancia - públicos o privados - o los centros de cuidado afiliados a los principales grupos religiosos.


Carla en uniforme del kinder - no tiene cara de contenta
Para los expatriados, las opciones viables son los kinders privados y los jardines de infancia privados; ambas opciones, costosas y a veces no disponibles por las listas de espera. El acceso a los jardines de infancia públicos está restringido para los extranjeros, por razones de demanda y de preferencia para los ciudadanos de Singapur en las listas de admisión.

Hay jardines de infancia privados con educación bilingue Inglés - Mandarín que incluso siguen el sistema Montessori de educación preescolar - es en uno de estos centros donde recientemente inscribimos a nuestra Carla - y nos alegra participar que ella está disfrutando de su kinder a "medio tiempo" - entre 8am y 1pm.

Existen también los kinders con afiliaciones religiosas - si los padres tienen preferencias por esta clase de institución hay la posibilidad de acceso, pero también habrá que esperar en listas - el acceso a instituciones en Singapur raras veces sucede sin pasar meses en una lista de espera.

Por último están los "centros de enriquecimiento" - los que desaconsejo categóricamente: diseñados para atender la demanda de un público local que demanda "enseñanza" sobre "cariño" y son mas bien empresas para hacerle dinero al dueño.

El Ministerio de Educación local no regula estos centros  - pero lo más grave es que utilizan un sistema educativo adaptado a los gustos locales -repetición, memorización, "obediencia a la autoridad" y "pertenencia al grupo" - pero completamente desfasado según la percepción Occidental de cultivar la individualidad, la creatividad y las artes visuales.

En muchos "centros de enriquecimiento" (de los dueños, claro) incluso llegan al extremo de exigir que una niñera acompañe al bebé durante la clase, ya que no cuentan con suficiente personal de cuidado (!)

Mi recomendación: siempre pedir una "clase inicial de prueba" antes de pagar la inscripción - la mayoría de los kinders privados permiten hacerlo; y esta es una señal que permite conocer la calidad de la enseñanza, y el desenvolvimiento del nene en el centro. Si el kinder no acepta una clase de prueba, es una señal negativa.

Nostros escogimos un kinder Montessori, despues de haber metido la pata en un "centro de enriquecimiento" (al que fuimos una sola vez y perdimos dinero) - y Carla está contenta, y aprendiendo mucho.